jueves, 5 de abril de 2018

Voy a tener un bebé, ¿En qué merece la pena que invierta y en que no?

  Enterarte de que estás esperando un bebé te llena de dudas, emociones, alegría, etc. Y te hace tremendamente vulnerable ante las compras de puericultura y ante los vendedores de dichos productos.

Fuente: Pixabay. Sé que no tiene mucho que ver con el tema del post, pero me hizo gracia la imagen y tampoco quería poner de portada un producto concreto.

  Cuando nosotros recorríamos tienda tras tienda, buscando el carrito más ideal, con mejor capazo y silla (daba igual el grupo 0 cómo fuera, total, eso no se veía…), peso reducido, estética, etc. no veíamos en ningún momento el absurdo que supone gastarte cerca (o más) de los 1000€ en algo que, a lo sumo, usará durante su primer año de vida. La historia del carrito de Eyre se resume en que está nuevo. Y no por su calidad (que la tiene), ni por lo bien cuidado que está. Simplemente Eyre nunca quiso carro y dejamos de usarlo en cuanto comprendimos que no lo soportaba. Y diréis, “pues haberla dejado llorar, que se acostumbrara al carro”. Bien, si decís eso y pretendéis que lo tenga en cuenta, lo siento, o bien no nos conocéis o no sabéis que somos incapaces de dejar que nuestra hija sufra para “amortizar” un artilugio hecho para nuestra comodidad, no para la suya.

  Con el tiempo nos hemos dado cuenta de todas esas cosas en las que mereció la pena invertir y esas que no. Evidentemente, os hablo desde nuestro punto de vista, de nuestra experiencia, y de lo que ahora, pasado el tiempo, pensamos.

  Si había una cosa en la que teníamos claro que no íbamos a invertir era en la trona. Veíamos tronas supersónicas que rozaban (o superaban) los 100€. Tronas reclinables (si un bebé no se mantiene sentado NO debe comer nada que no sea leche, por lo que es absurdo esa reclinación), con acolchados (quien las diseña no sabe lo que ensucian las personitas cuando comen) y arneses de súper seguridad (NUNCA hay que atar a los peques mientras comen, NUNCA).
Fuente: Ikea.com catálogo de productos

  Y veíamos la archi-conocida trona de Ikea, desmontable, fácil de limpiar, barata (con acolchado y bandeja no llega a 30€)… y tuvimos claro que esa sería la trona en la que aprendería a comer y a disfrutar de la comida nuestra hija. He de deciros que fue de las mejores compras, sin duda alguna.

Pero, ¿en qué merece la pena invertir? ¿y en qué no?

  Son pocas las cosas en las que, a día de hoy, consideramos que vale la pena gastarse un poco más de dinero.

  Si hay algo fundamental, vital, imprescindible, llamadlo como queráis, eso es el sistema de retención infantil para el coche.
Klippan Century, la silla que utiliza Eyre y que le servirá para muchos años
  Compradle el carrito más básico, la ropa más barata, pero, por favor, invertid en un buen sistema de retención, esto es, a contra marcha, con los elementos de seguridad necesarios. Huid de las grandes superficies y buscad un verdadero centro especializado en sistemas a contramarcha.

  Si habéis decidido dar lactancia materna, un buen sacaleches es fundamental. Bien sea porque necesitéis estimular vuestra producción, bien sea para crearos un banco de leche, un sacaleches efectivo y adecuado es muy necesario.
Fuente: web oficial de Medela

  Tengo mi gran preferencia por el sacaleches Swing de Medela, pero seguramente haya alguno más en el mercado que se le asemeje. Yo probé varios, bastante más económicos que este, por cierto, y a parte de ser una tortura, no eran nada efectivos.

  Siguiendo con la lactancia materna (siento no hablaros de artificial, porque no tengo conocimientos sobre biberones y leches de fórmula), tener en casa algún libro sobre lactancia, como “Un regalo para toda la vida” de Carlos González, o “Somos la leche” de Alba Padró (de los que ya os hablé en este post), puede sacaros en algún momento puntual de alguna duda.

  Todo lo demás que venden para la lactancia materna es, bajo mi punto de vista (y me consta, que bajo el de muchas asesoras de lactancia) completamente prescindible (o que no hace falta gastarse mucho). Los discos de lactancia, la mayoría de cremas para los pezones, los sujetadores de lactancia (si fuera de la etapa lactante es mejor ir sin sujetador, lactando es más que recomendable), los cojines de lactancia (uno básico o, al menos, que no cueste 50€ como el mío, “castaña” donde los haya)

  La bañera es otro de esos elementos que a día de hoy no vemos tan imprescindibles. Es decir, sí que es más o menos necesario disponer de algún adaptador o bañerita para nuestro bebé, pero, siendo realistas, las bañeras-cambiador acaban siendo un trasto, ya que son bastante aparatosas a la par que incómodas (poner la tapa-cambiador mientras sostienes a tu bebé mojado en brazos es, a veces, una odisea).

Nosotros, la mayoría de veces, por no decir siempre, bañábamos a Eyre y la secábamos y vestíamos en nuestra cama (mayor comodidad y seguridad)

  La cuna, ese trasto que tantas familias acaban usando para poner la ropa y no para que duerma el bebé. Nosotros, por ejemplo, sí que la usamos, pero como un anexo a nuestra cama, con los barrotes delanteros desmontados, a modo de cuna-sidecar. Así es que mi consejo es: sí, comprad una cuna, pero no, no os gastéis mucho dinero. Pero fijaos sobretodo en que pueda desmontarse la parte delantera (por si, aunque no llevéis idea de colechar, acabáis colechando por el bien de la salud familiar)

  Por supuesto, un gasto muy muy inutil es la ropa. Primero porque nuestras personitas favoritas crecen rapidísimo, y, segundo, porque les gusta ir por el suelo, ensuciarse, y, siendo sinceros, nos sabrá menos mal que estropeen unas mallas baratitas que unos pantalones caros. Las "marcas" por las que siempre nos decantamos para la ropa del día a día (y bodys y pijamas) son Primark, Kiabi, Alcampo y Carrefour. También, si conocéis a alguien que se preste a dejaros ropa, es una gran suerte (que nosotros hemos tenido y tenemos en la actualidad)

  Si por convicción o por necesidad (nuestro caso, ya que, como os comentaba, Eyre no soportaba el carro) os compráis una mochila porta-bebé, es fundamental que ésta sea ergonómica.
Mochila ergonómica evolutiva Emei Baby

  Las "colgonas" son perjudiciales para lxs peques en muchos sentidos, así que buscad una tienda especializada y comprad una buena mochila (y si no, es mejor no portear)

  No os he hablado de los andadores, ya que no lo considero un gasto "tonto", sino perjudicial. Tan malo es el andador que cuesta 100€ como el de 20€.

  Básicamente, estos son los artilugios de puericultura básicos en los que creemos que merece la pena invertir y los que no. Sé que hay muchas otras cosas que se venden para bebés en cada una de sus etapas, pero, en general, todas ellas son prescindibles (vajillas para bebés, cadenas para chupetes, mordedores supersónicos, potitos, yogures de bebé, cereales sin azúcar con el 30% de azúcar, etc.)

  Me gustaría que me hablaráis de esas cosas que comprasteis u os regalaron a las que no le habéis encontrado utilidad real, o esos objetos en los que invertisteis un dinero que a día de hoy veis innecesarios.

Nota: Todas las marcas que cito son como recomendación principal. No me han regalado nada por nombrarlas.

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